Levantamiento
El primer paso de cualquier modernización es detectar lo que hay que modernizar. A este proceso lo denominamos “Levantamiento”. Para ello utilizamos herramientas propias del lenguaje, y nuestro propio inspección de la aplicación, para crear un inventario de elementos o partes utilizadas y su interrelación. También se detectan partes y código no utilizado.
Este proceso elimina incertidumbres acerca de qué componentes hay que modernizar.
Arquitecturas destino
La decisión de la arquitectura hacia la cual se portarán las aplicaciones a modernizar es una decisión crucial. Felizmente, para aplicaciones desarrolladas en BBx/VPro5, está decisión no es difícil de tomar, pues BBj es la ruta natural hacia la modernización de su aplicación, sin el riesgo de perder la madurez del sistema, y hasta conservando aquella lógica que no requiere cambios. BBj mantiene compatibilidad en 99% con el código heredado de su aplicación.
Tooling
La construcción de herramientas para modificar las aplicaciones antiguas y transformarlas a la nueva arquitectura, es vital para asegurar la rapidez, seguridad y calidad de las aplicaciones modernizadas.
Proceso de modernización
El proceso de modernización debe cumplir con tres premisas fundamentales:
- Ser muy rápido.
- Ser posible de ejecutar por técnicos que no conozcan las aplicaciones a modernizar.
- Permitir la convivencia con el resto de aplicaciones de la instalación.
La rapidez en la modernización es fundamental para evitar dobles mantenimientos. Si el proceso de modernización se demora en el tiempo no se podrá reemplazar la antigua aplicación de forma rápida y obligará a mantener dos aplicaciones en lugar de una.
Las aplicaciones modernizadas deben convivir con el resto de la instalación incluso con aplicaciones que aún no han pasado por el proceso de modernización.
El futuro de las aplicaciones modernizadas
Las gerencias TI cuando tienen que decidir si afrontar o no un proceso de modernización se plantean los mismos interrogantes:
¿Cómo quedarán mis aplicaciones modernizadas?
¿Serán mantenibles?
¿Evolucionarán mis aplicaciones modernizadas?
¿Podrán encargarse del mantenimiento mis actuales recursos técnicos ?
A todas estas preguntas podemos responder afirmativamente.